La instalación me decepcionó un poco. El resultado daba la sensación de que los muñecos habían invadido la casa, no de ser una "Casa de Muñecas". No estaba a la altura de mis expectativas... y no dejaba de ser el salón de mi casa. Pero tenía que intentarlo, e hice algunos hallazgos; de modo que si volviera a repetirlo sabría qué elementos funcionan juntos y cómo hacer sitio a los muñecos.
Con el proyecto en general estoy bastante satisfecha. En la experimentación he probado muchas cosas, he puesto alambres, gomas y pegamento; he hecho zapatos, he teñido cabelleras y maquillado cuerpos, y hasta he sacado moldes de los muñecos... Siempre se puede hacer más, y me habría encantado poder modelar piezas a mi gusto y ensamblar muñecos más complejos o más grandes. En cuanto a la fotografía, es el mejor registro de mi trabajo y creo que he conseguido crear imágenes efectivas con medios muy limitados (pañuelos, tapetes y lámparas de mesa).
En el futuro me podría plantear hacer un stop-motion. Estos muñecos tienen bastante personalidad y serían buenos personajes para una animación. En este verano, trabajando sola y con poco más de un mes de tiempo, me era imposible.
También me he planteado, aunque suene a broma, crearle una cuenta de Facebook a Lolita en la que publicar sus fotos. Y ver cómo reacciona la gente. No sé si para Lolita supondría una forma de tener popularidad o una forma más de explotación. En ese caso, yo sería una especie de "chulo" que comercia con fotografías perversas. Pero son sólo remordimientos que me asolan a veces, y temo que se mueva y venga de noche a mi habitación a vengarse por lo que le he hecho...
Volviendo al tema, creo que he conseguido herramientas para continuar con esta línea de trabajo en el futuro. Los muñecos, maniquíes y marionetas siempre me han gustado, y voy a continuar recolectando muñecas rotas y utilizándolas de un modo artístico, lúdico o decorativo. Cuando empecé tenía un entusiasmo intelectual militante y sentía que mis muñecos iban a revolucionar los cánones estéticos. A medida que iba jugando con ellos, me fui encariñando cada vez más con sus caprichosas formas y ahora los veo desde un punto de vista más cercano. No son máquinas de guerra... son sólo muñecos.
Bibliografía
- Pilar Pedraza: Máquinas de amar. Secretos del cuerpo artificial. Editorial Valdemar, Madrid, 1998.
- Hans Bellmer: Anatomía de la imagen. Ediciones La Central, Barcelona, 2010.
- Henrik Ibsen: Casa de muñecas. Ed. Alba, Madrid, 1996.
- Vladimir Nabokov: Lolita. Unidad Editorial, Madrid, 1999.
Filmografía
- "Lolita", Stanley Kubrik (1962)
- "Lolita", Adrien Lyne (1997)
- "Jabberwocky", Jan Svankmajer (1971)
- "Tamaño natural", Luis García Berlanga (1973)